Un hombre lanza desde la ventana de un tercer piso una bombona de propano y una bolsa con marihuana en Ferrol: «No pasó algo de milagro»

FERROL CIUDAD

JOSÉ PARDO

Un naranjo amortiguó la caída de otros enseres arrojados a la calle, desde joyas y relojes a una mesa, cajones y libros

07 may 2024 . Actualizado a las 22:05 h.

Un incidente ocurrido este martes en el centro de Ferrol sobrecogía incluso después de lo ocurrido a los viandantes. Hacia las diez de la mañana un hombre de mediana edad comenzó a arrojar por la ventana de un tercer piso los enseres que acumulaba en el interior de su vivienda. A la calle lanzó hasta una bombona de gas propano. Y muebles, entre otros muchos objetos. «No pasó algo de milagro», acertaban a decir los curiosos que pasaban por el lugar y se detenían sorprendidos por la estampa y el despliegue policial. Pero no solo eso: por la fachada opuesta, tiró a la terraza interior una bolsa con 200 gramos de marihuana que, según fuentes próximas al caso, él mismo cultivaba en la vivienda. 

Ocurrió en el número 16 de la calle del Carmen, en el tramo peatonal que comunica la plaza del Callao con el Cantón y las Angustias. Y la providencia quiso que no se produjeron daños personales, ni tampoco materiales. El objeto más contundente, la bombona, estaba medio llena. Y antes y después de ella llovieron sobre la calle tubos de ventilación, una mesa, dos sillas, cajones, gruesos libros y elementos de cristal, que quedaron hechos añicos sobre el pavimento, entre una gran cantidad de naranjas. Esas frutas no fueron lanzadas desde el tercero, sino que cayeron de un árbol situado frente al portal, que resultó golpeado y amortiguó la caída de algunos de los enseres, que quedaron retenidos por las ramas.

JOSE PARDO

El suceso pudo ser observado desde una terraza próxima en la que varios clientes aprovechaban la mañana de buen tiempo para tomar algo al aire libre. Y motivó un amplio despliegue policial en la zona. Hasta el lugar se desplazaron varias patrullas de la Policía Nacional y también se acercó una de la local, que no llegó a intervenir. Agentes del cuerpo de seguridad nacional subieron hasta el piso en el que se hallaba el hombre, de iniciales A.L.O. y de 60 años, y con problemas de salud mental, según indicaron fuentes consultadas. Y allí permanecieron con él hasta la llegada del servicio de urgencias del 061. Bajó por su propio pie, acompañado por los policías y el personal sanitario, y fue introducido en una ambulancia, en la que fue trasladado al hospital Arquitecto Marcide para su valoración psiquiátrica, según confirmaron fuentes oficiales del Cuerpo Nacional de Policía. 

Entre la cascada de objetos lanzados a la calle se encontraban también algunas joyas, aparentemente antiguas, como relojes, anillos, collares y algunas monedas. También medidores de anillos, presumiblemente pertenecientes a su actividad como orfebre, que desarrollaba hace un tiempo. De hecho, la mesa que arrojó era la que utilizaba, al menos hace años, en su labor artesanal.

El servicio municipal de limpieza se encargó de retirar después los materiales desechados.