Isabel Echavarría, oncóloga: «No tomar suficiente fibra aumenta el riesgo de cáncer»
ENFERMEDADES
La experta explica que las probabilidades de sufrirlo aumentan con el paso de las décadas, por lo que se espera que los casos sigan aumentando en los próximos años debido al envejecimiento poblacional
07 feb 2024 . Actualizado a las 16:33 h.El rey Carlos III de Inglaterra ha anunciado que se está tratando por un cáncer. A sus 75 años, el monarca ha recibido este diagnóstico y decidió comunicarlo a través del Palacio de Buckingham para contribuir a la concienciación acerca de esta patología que es cada vez más prevalente.
El cáncer no solo es una de las principales causas de muerte en España y a nivel mundial. Es, especialmente, una preocupación para los hombres, que tienen más probabilidades que las mujeres de desarrollar un tumor. Este riesgo aumentado de los varones es más pronunciado en la edad avanzada. Desde el nacimiento hasta aproximadamente los 45 años, los hombres tienen una probabilidad del 40,2 % de padecer cáncer, mientras que las mujeres presentan un 28 %. Una vez cumplidos los 85, los valores se incrementan hasta un 47,8 % en la población masculina, y hasta un 32,7 % en la femenina.
Analizamos los tumores más prevalentes en la población masculina, las medidas preventivas que ellos pueden tomar para protegerse a lo largo de la vida y las perspectivas para los próximos años junto a Isabel Echavarría Díaz-Guardamino, oncóloga médica del Hospital General Universitario Gregorio Marañón y también secretaria científica de la Sociedad Española de Oncología Médica (Seom).
—¿Cuáles son los cánceres más comunes en hombres?
—Los tumores más frecuentes en hombres son el cáncer de pulmón, el cáncer de próstata, el de colon y los tumores de la vejiga urinaria.
—¿Cuáles son los factores de riesgo asociados al cáncer en hombres?
—Todo depende del tipo de tumor. En el cáncer de pulmón, claramente, es el consumo de tabaco. En cambio, en el cáncer de próstata, no están claros del todo los factores de riesgo. En el de colon y recto hay muchos factores, por ejemplo, la obesidad y las dietas inadecuadas aumentan el riesgo, pero no hay una relación tan directa como en el cáncer de pulmón con el tabaco.
—¿Cuál es el rol de la genética y los antecedentes familiares en el desarrollo de cáncer?
—No tiene tanto peso de manera general. Al final, el porcentaje de cánceres que se deben a mutaciones, es decir, que son hereditarios, son pocos. En la mayoría de los casos, tienen más que ver los factores personales como la edad o los hábitos de vida.
—¿Qué hábitos de vida pueden contribuir a prevenir el cáncer en los hombres a lo largo de la vida?
—Una de cada tres muertes por cáncer es evitable. Si no consumes tabaco, no bebes alcohol, haces una dieta sana, mediterránea, evitando los procesados y las bebidas azucaradas, con un buen consumo de frutas y verduras, y haces ejercicio físico de manera regular, evitando el sedentarismo, tu estilo de vida será saludable y puede contribuir a reducir el riesgo de cáncer.
—Los alimentos ultraprocesados, como los embutidos, se han asociado a un aumento del riesgo de cáncer. ¿Cuál es el rol específico de la alimentación en el desarrollo de tumores en hombres?
—La alimentación puede contribuir significativamente, se ha visto que una dieta mediterránea puede ser beneficiosa para reducir el riesgo de cáncer y, por el contrario, el consumo de carnes procesadas y bebidas azucaradas, específicamente, aumenta el riesgo. También sabemos que no tomar suficiente fibra aumenta el riesgo de tener tumores. En definitiva, es ese patrón de dieta más insano el que se relaciona con este aumento en las probabilidades de tener cáncer.
—¿El ejercicio físico también es importante para los pacientes que ya tienen un cáncer diagnosticado?
—Sí. Se ha visto que hacer actividad física no solo reduce el riesgo de cáncer, sino que mejora la supervivencia de aquellos que ya lo tienen.
—¿Cómo podemos llegar a una detección temprana del cáncer?
—Los cribados que están aprobados en hombres son únicamente los de cáncer de colon o de próstata. Porque el de mama y el de cérvix se realizan en mujeres. El cribado en cáncer de pulmón ha demostrado que puede reducir la mortalidad, pero todavía no está establecido en España. Aunque reduce las muertes en población muy fumadora, también tiene sus efectos adversos, entonces, se está evaluando si se instaurará o no en el país.
—El cribado del cáncer de colon se realiza en pacientes de hasta 69 años. ¿Por qué se ha establecido ese tope de edad?
—Porque a partir de allí, no está demostrado que mejore la supervivencia.
—¿Qué medidas específicas de prevención se pueden recomendar para los hombres?
—Las mismas que hay para las mujeres. Evitar el tabaco es lo primero, porque es el factor de riesgo eliminable más importante. Luego, reducir el consumo de alcohol y, en lo posible, quitarlo, porque todo consumo de alcohol incrementa el riesgo de cáncer. Llevar una dieta equilibrada, mediterránea, y hacer ejercicio físico también son medidas que contribuyen.
—¿Cuáles son los últimos avances en el cáncer? ¿Qué estrategias hay en desarrollo?
—Se están evaluando nuevos fármacos, en este sentido, la inmunoterapia está teniendo muy buenos resultados, está aprobada en muchos tumores y lo que hace es activar el sistema inmune frente al tumor. Luego, se están desarrollando muchos tratamientos dirigidos frente a mutaciones o alteraciones concretas de cara al tumor. Dependiendo de cada subtipo tumoral, hay avances guiados a un tipo de tratamiento u otro, pero, fundamentalmente, esas dos áreas son las más importantes.
—¿Cuál es el impacto de la edad en el riesgo de cáncer?
—Es un factor de riesgo, claramente. El riesgo de cáncer aumenta con la edad. Como la gente vive más años, si hay un envejecimiento de la población, hay más cáncer y este es un aumento significativo. Cuanto más cumplen años, mayores probabilidades de sufrir un cáncer. Se estima que uno de cada dos hombres a lo largo de su vida va a tener un cáncer. Las cifras están aumentando claramente, y se espera que sigan aumentando en los próximos años tanto a nivel nacional como mundial.
—¿Se espera que la mortalidad por cáncer disminuya en los próximos años?
—Sí, porque a medida que logramos que más casos se diagnostiquen antes y los tratamientos también van mejorando, la supervivencia también va aumentando, afortunadamente.
—A partir de los 75 u 80 años este riesgo es más pronunciado. ¿Qué se puede hacer a esa edad para evitarlo?
—Realmente, no hay una estrategia establecida por edad. Lo que hay que hacer es consultar ante síntomas de sospecha.
—¿Cuáles serían esos síntomas que nos puedan hacer pensar en un cáncer?
—Depende mucho del tipo de tumor, porque cada tumor da un tipo de síntomas y no tiene nada que ver un cáncer de pulmón que uno de colon. Pero un sangrado digestivo, en las heces, o una tos que no cede a lo largo del tiempo son síntomas claros frente a los que hay que consultar. Pero, por ejemplo, el cáncer de páncreas, o el de pulmón, no suelen dar síntomas al principio y entonces cuesta más diagnosticarlos de manera precoz.
—¿El manejo de un caso de cáncer es diferente en los grupos de edad avanzados?
—En principio, la edad no tiene por qué ser un criterio de modificación de tratamiento en sí. Pero lo que sí que pasa es que hay que tener en cuenta la situación del paciente y qué otras enfermedades tiene, porque, muchas veces, con la edad, los pacientes tienen otras patologías aparte del cáncer. Pero con solo la edad no podemos decidir no poner un tratamiento, por ejemplo. Hay que adecuarlo a las necesidades de cada paciente.
—¿Qué recomendaciones puede dar de cara a la prevención en mayores?
—Hay que incidir en el dejar de fumar. Porque aunque hayan fumado a lo largo de su vida y eso haya aumentado su riesgo de cáncer, los beneficios empiezan desde el día en el que se deja de fumar, entonces es fundamental insistir en eso. Yo incidiría en que puedes hacer algo por reducir tu riesgo de cáncer dejando de fumar, eliminando el consumo de alcohol y llevando un estilo de vida saludable. Y ante un síntoma de sospecha, o cualquier síntoma inusual, les diría a los pacientes que consulten a su médico.